Cocina y comedor

**Mark Renton** Lun Mayo 03, 2010 2:07 am

Empujo la puerta de la cocina con un brazo estirado hacia adelante, recién bañado y con el pelo chorreando algo de agua por mi cuello y parte de la nuca. Detrás me sigue Evan y no necesito mirarla para comprobar que es así, deteniendome con la puerta cojida para que pase ya que es de esas que se cierran solas.
Una vez que lo hace mi mirada se fija directamente en los dos habitantes que hay en la habitación; Christian, el cual se fuma un peta sosteniendolo con sus labios apretados y pelea con el biberón sumamente concentrado, adivino que no puede con algo tan simple como abrirlo. Y ella, la pequeña, sentada sobre la mesa y golpeteando la madera con el sonajero demasido entretenida.
-Joder, mira que yo soy bruto. ¿Pero dejar un bebé sobre la mesa? muaja

- me río más de los nervios que otra cosa y acelero el paso hasta quedar parado junto a la niña, como vigilando sus movimientos y más que nada que no caiga de una altura tan grande.
Ella alza la mirada con una sonrisa que desborda inocencia, está de más decir que con la edad que tiene todavía no es consciente de los peligros que la rodean. Como por ejemplo su tío Christian.
-Buen día mi amor, ¿te has portado bien con el yonki de tu tío? shy

- en cuanto la niña ve a Evan suelta el sonajero sin miramientos y lo deja caer al suelo, estirando sus manitas hacia mamá a medida que abre y cierra los puños.

**Evangeline Voltaire** Lun Mayo 03, 2010 2:26 am

Entro tras Mark aprovechando que él abre la puerta para removerme el pelo casi seco, para terminar de hacerlo. Después de poco tiempo me peino el flequillo con los dedos y espero que Mark camine hacia donde quiera que fuera para dejarle que se quedara con Catherine para observar la situación: no tardo en reaccionar porque aquí dentro había muchas cosas que arreglar. Camino hacia Christian quitándole lo primero el peta de la boca casi terminado y tirándolo por la ventana sin ninguna compasión. Le arrebato el biberón y ejerzo presión en dirección contraria hacia donde él lo hacía, abriendolo y dejando las dos partes en sus manos. Supongo que todo lo que tenga que reñirle lo hará Mark que tiene más confianza con él y sabe que lo principal que quería hacer era ver a la niña. Justo cuando miro a ambos Mark terminaba de hablar y dejo que lo haga, riéndome por lo que dice y sonriendo ampliamente ante el gesto de la niña de soltar el sonajero y exigirme que la coja. Yo avanzo hacia ella y no dudo en hacerlo, poniendo mis manos bajo sus bracitos para alzarla de la mesa (¿qué hacía ahi?) y cogerla poniendo un brazo alrededor de su cintura, con sus piernas una a cada lado de mi cuerpo. Mis labios van a su mejilla y la beso ansiosamente repitiendo sonoros besos allí con todas las ganas que tenia de verla y de hacerlo.
-Bonjour ma fille shy

¿A qué niña de mamá le van a dar un baño cuando el papá y el tío le exijan intimidad? -digo después de besar su mejilla y llevar el índice a la nariz de la niña, haciendo que ella cerrara los ojos con fuerza como siguiéndome el juego. Me muevo para alzarla y descenderla levemente en un leve movimiento, volviéndolo a hacer y mirando a Mark por si él quería saludarla también. Sé que tenia ganas de hacerlo, y tambien sé que así me entenderá, por lo que no dejo de mirarle.

**Christian Renton** Lun Mayo 03, 2010 6:08 am

Estoy dando una profunda calada al peta cuando la puerta se abre y no me molesto en girarme para ver quién se atreve a invadir mi momento de paz y meditación, demasiado concentrado en el biberón como para hacer algo.
Nada más escuchar esa voz riñiendome sobre lo que hago con su hija suelto un suspiro en el que aprovecho para lanzar el humo, sabiendo que es Mark. -¿Qué dices tío? Si la dejo en el suelo puedo pisaaaarla - arrastro las palabras al hablar totalmente ido, es como si no estuviera en este mundo.
Decido no comentar nada cuando se pone en plan padre baboso con su hija y continuo a lo mío, frunciendo aun más el ceño de la concentración. Maldito biberón. -...esto, ¿cómo hago? - inquiero en el exacto mismo segundo que alguien me arrebata el peta de la boca, sin duda es aroma de mujer. Ladeo la cabeza en su dirección, con los ojos achinados y una sonrisa que denota mi estado. -¿Por qué haces eso con mi medicina? Era el último scratch

- me quejo entre dientes ni cerca de estar enfadado, notando que dos segundos después me arrebata el biberón y lo abre así como así. Si es que las mujeres son una raza superior, no lo dudo ni un poco.
Parece que mi cuñada no está de humor con todo el tema de que soy un terrible niñero y aprovecho que los padres se emboban con su hija para escabullirme en silencio, arrastrando mi espalda sobre la pared en plan agente secreto. Cuando llego a la puerta me detengo, quedandome con la boca entreabierta y una cara de gilipollas de campeonato... colgado y con la mente en blanco, aun sosteniendo el biberón.

**Mark Renton** Lun Mayo 03, 2010 7:32 am

Desvío la mirada de la niña hacia Evan justo en el momento que le saca el peta a mi hermano y no puedo evitar reirme entre dientes, negando varias veces con la cabeza en cuanto él responde. No puedo negar que las cosas han cambiado en casa desde que hay mujeres... y vaya dos. Debo admitir que mola la confianza que alcanzaron en tan poco tiempo, no cualquiera le saca el peta a Christian sin recibir una colleja.
Mientras pienso esto mis ojos ya se encontraron con Catherine otra vez, observándola con ternura y medio inclinado sobre la mesa en la que ella reposa. Todavía me parece fascinante, es un ser tan puro. Evan no tarda en acercarse y la coge en brazos, haciendo que mi mirada se alterne de una a la otra. De momento olvido a mi hermano y ni siquiera me percato de sus intentos por huir sin ser visto.
-Yo digo que nos echaba de menos. Mira como sonríe *-* - beso la mejilla de la niña repetidas veces, imitando el gesto de Evan aunque del lado opuesto del rostro... para equilibrar, vamos. La sonrisa de mi rostro tampoco desaparece, está claro que todos nos echamos de menos esta vez. De pronto el echo de que seamos una familia se hace más real, no sé si tiene que ver con el juramento inquebrantable pero el caso es que nos siento más unidos que nunca . -Tenias razón, no sé si soportaremos la luna de miel separados de nuestra niña -
Antes de separarme beso la comisura del labio de Evan, buscando a Christian con la mirada algo extrañado. Al encontrarlo en la puerta con esa cara alzo una ceja, evitando reir.
-Hmm, tío. Tenemos que hablar, pero algo me dice que no es el momento Suspect

- le miro a el dandoles la espalda a las mujeres de la casa, con un leve encogimiento de hombros. No lo veo muy para la labor de tener una charla seria, la verdad. No quiero ser un coñazo pero fumar frente a la niña es algo que debería haberle prohibido hace mucho.

**Evangeline Voltaire** Jue Mayo 06, 2010 10:02 pm

Cuando Mark termina de saludar a Catherine pongo la mano en la nuca de la niña correspondiendo a su beso rápidamente y acerco su rostro a mi pecho aun acunándola entre mis brazos, como evitando así que pudiera oler el mínimo humo que emitiera el peta de Christian. De hecho decido no comentar nada porque me estaban entrando ganas de gritarle, pero tampoco era momento ni yo la indicada para hacerlo...
Catherine frota la carita contra mi pecho como si supiera que era lo que yo quería mientras la sostengo con un brazo y con el otro aparto la cortina de la ventana, totalmente paranoica. Respondo con una media sonrisa a lo que dice de echarla de menos en el viaje, enganchando la cortina en cualquier lugar posible y volviendo la otra mano a la nuca de Catherine, abrazándola.
-No sé si sonrie a conciencia, pero sí :braq:

-respondo mientras él se daba la vuelta, no me había dado cuenta de que Christian se había apartado tanto del lugar. De hecho, prefería no mirarlo. Es cierto que llegamos a una alta confianza mi cuñado y yo pero hay cosas de adicción que no me gustaban, no solo en Christian si no tambien en Mark. Tampoco era la indicada yo para reformar eso, pero es lo que hay. Al menos lo de Mark no es tan exagerado...
-Venga mi niña, ya está -digo rozando el mentón de la niña como diciendo que ya puede apartar el rostro, aunque no lo hace. Al escuchar la frase de Mark me acerco ceñuda a Christian para que me devolviera el biberón, más bien cogiéndolo de nuevo de sus manos con la que tenia libre antes de que se le cayera. Estaba poco ilusa si creía que lo iba a llenar de nuevo... miro a Mark por si quiere que aborte plan y que me vaya a bañarla, que sabe que yo lo hago sin ningun problema y puede venir cuando termine con su hermano.

**Mark Renton** Sáb Mayo 08, 2010 3:10 am

Yo me encuentro todavía girado hacia Christian cuando Evan le saca el biberón de las manos y este no hace otra cosa que alzar las cejas con sorpresa, como si en su mente no entrara la idea de que fumar frente a una bebé es lo que nos enfada. Nuestra bebé, por si fuera poco. Encoje sus hombros sin más antes de darse media vuelta para retirarse de la habitación y yo suspiro entre dientes con cierta resignación, volviéndome hacia Evan y la niña. En parte mejor que se haya ido, no voy a hablar con él sobre esto en el estado que se encuentra... luego olvidaría nuestra conversación y no me apetece repetirlo. Mi paciencia tiene su límite.
-Ya hablaremos luego - mascullo a mi chica como intentando que Catherine no se entere, aunque es obvio que no lo hace. -Ahora quiero estar con mis niñas :braq:

-
Dicho esto me acerco nuevamente hacia ellas, caminando con parsimonia. Las miro fijamente por un momento en el que me pierdo en la imagen que hacen juntas, como tantas otras veces. Lo cierto es que todavía me parece algo increíble que seamos padres, y que nuestra hija sea el ser más precioso del mundo. Tan frágil y tierna. Al salir de mi ensimismamiento cojo la leche que Christian ya había sacado de la nevera y pongo a calentar el líquido en una cacerola pequeña, encendiendo la hornalla con un chasquido de mis dedos.
-¿Quién tiene ganas de beber una lechita caliente? shy

- inquiero melosamente con la vista dirigida hacia la niña, cogiendo las dos partes del biberón que Evan sostiene a la misma vez.
No me fijo en la leche todavía si es que acabo de ponerla, sino que me mantengo quieto, alternando la mirada de los ojos de Evan hacia los de Catherine... atento a cada uno de sus gestos como si fuera algo de otro mundo.

**Evangeline Voltaire** Jue Mayo 13, 2010 12:20 am

Miro a Catherine que hace rato que había dejado de estar contra mi pecho, evitando mirar a los hermanos como si así pudiéramos darle un mínimo de intimidad. Mi nariz roza muy levemente la de ella ya que no deja de moverse, soltando sílabas inconexas y moviendo ambas manos con los puños cerrados. A lo mejor no quería mirar lo que era obvio que Christian iba a hacer en este momento: darse la vuelta e irse despreocupadamente, a lo mejor a dormir la mona. Desvío la mirada de Catherine que sigue moviéndose incesantemente ajena a todo, probablemente acabe de despertarse y esté así de activa. Cuando vuelvo a mirar, estaba Mark solo ya girado hacia nosotras.
Asiento con la cabeza comprensiblemente ante las palabras de Mark, en parte me imagino que debe estar acostumbrado al crecer con Christian pero extrañado porque por primera vez el tema que van a tocar es su propia hija... y sin necesidad que me lo diga yo comprendo todo eso. Una situación familiar en uno extraño. Supongo que debe estar pensando en todo eso y en la imagen que doy con ella cuando nos mira fijamente, antes de coger la leche para calentarla. Frunzo el ceño en una mueca aun sin convencerme eso, casi que prefería la que fuera maternal, pero supongo que no tenía más remedio en mi ausencia... pronto debería ir al pediatra. Comento la idea en voz alta para compartirla con Mark, convencida de que está demasiado concentrado en preparar la leche como para mirarme y comprenderlo.
-Creo que Catherine -respondo graciosa aunque pensativa todavía desesperándome mientras no me mira, aunque sea poco tiempo, y una vez que lo hace me pongo de espaldas al banco vacío y limpio al lado de donde estaba preparando la leche pero a algunos metros, poniendo la mano que no coge a Catherine en el borde e impulsándome para sentarme extraordinariamente ahi, mirando ahora a Mark desde una ligera altura, unos escasos centímetros, con los pies colgando. Catherine acaba sentada en mi regazo mientras la sujeto con ambos brazos, mientras ella alterna la mirada a varios lugares del cuerpo de su padre mirándolo con curiosidad.
-Mark... ¿estás bien? -le pregunto intentando iniciar una conversación con él, hace tiempo que apenas teníamos tiempo para eso, y fijo la mirada en el confidentemente como pidiendole sin palabras que me diga qué es lo que se le cruza por la mente.

**Mark Renton** Jue Mayo 13, 2010 1:13 am

Al escuchar su inquietud sobre el pediatra asiento inmediatamente, entrelazando mis manos entre sí de manera pensativa. Mi ceño se frunce sin que yo lo medite, mirando nada más que a Evan por un momento. Supongo que se refiere a un médico en Escocia... tampoco es plan viajar cada vez que necesitamos ir.
-Hmm... si quieres podemos llevarla al pediatra que me atendia a mi de pequeño - propongo no muy seguro y sin saber por qué razon estoy hablando en susurros y esbozo una media sonrisa, agregando lo próximo con un leve encogimiento de hombros. -El nos ayudó mucho cuando mis padres se fueron - sin él no estariamos aquí, para qué mentir. Los primeros meses se hizo cargo de ambos hasta que nacieron sus hijos, momento en el que tuvimos que vivir por nuestra cuenta. Él nunca pudo entender la razón por la que nuestros padres hicieron eso, y supongo que nos tuvo lástima en ese entonces. Creo que esto no sé lo he contado a nadie... y con Christian tampoco lo hablamos demasiado, nada que tenga que ver con el abandono. A saber por qué.
Vuelvo a desviar la mirada hacia la leche un par de minutos después y apago el fuego con un nuevo chasquido de mis dedos, sabiendo que no debe estar muy caliente. En eso noto que Evan se mueve a pocos metros de mi posición pero no me giro para mirarla, demasiado concentrado en llenar el biberón sin regar ni una gota del líquido. Por ello saco la punta de la lengua, fruncido aun más el ceño. En cuanto lo logro una sonrisa orgullosa se asoma en mis labios y giro el rostro hacia ellas una vez más, percatandome en ese momento de que se encuentran subidas a la mesada. Alzo ligeramente el mentón para poder mirarlas y muevo el recipiente lleno como para indicar que la leche está lista, sin entender a que viene aquella pregunta.
-¿Por qué? - inquiero, queriendo saber si hice algo extraño y pensando que tal vez mi mirada tan fija le ha dado un indicio de que me sucede algo. Yo sonrío despreocupadamente a la vez que me acerco biberón en mano y me detengo frente a Evan, dando un paso hacia adelante para quedar justo entre sus piernas. -No es nada... hace días que no las veía juntas y de pronto es como si todo fuera nuevo otra vez. Nunca dejaré de sorprenderme de lo bien que se ven juntas :braq:

- dicho esto mi mano libre rodea su cintura como acto reflejo, es algo que no puedo evitar al estar tan cerca. -¿A tí? -

**Evangeline Voltaire** Jue Mayo 13, 2010 1:32 am

Escucho lo que dice sobre el pediatra, comprendiendo que se refería a cuando sus padres les abandonaron... supongo que tiene mucho que agradecer a ese hombre y yo alzo las comisuras, comprendiéndolo todo. Obvio que asiento con la cabeza, rodeando con más fuerza a Catherine como por seguridad, sé que no ha sido fácil para él por lo que le miro con cariño. Como diciéndole en silencio que todo eso ha pasado y que estoy aquí... no para hacérselo todo más fácil pero sí para ofrecerle una seguridad. Tambien tengo en cuenta que es un tema delicado y que no lo habrá hablado con mucha gente, por lo que pregunto sutilmente por si no quiere responderme. -¿Piensas en ellos a veces? -pregunto, ¿habría algo diferente en él si eso no hubiera pasado? Eso es algo que me parece que no solo él ha pensado...
Cuando yo me siento el fuego ya estaba apagado y él ponía toda su concentración en no derramar nada... a mi me hace gracia por lo que me rio por lo bajo, contrastando la seriedad que permanecia en mi rostro tras hablar de lo que estábamos hablando. -Felicidades -susurro cariñosamente cuando se gira tendiéndome el biberón y yo alargo la mano para cogerlo, mirándole a él fijamente con una sonrisa. Yo tambien lo agito levemente, como si así me sintiera más segura de que se templa lo suficiente como para que Catherine pueda tomárselo.
-No sé... por hablar contigo de algo. Hace mucho que no lo hacemos, y eso no está nada bien -niego con la cabeza como si fuera obvio, exageradamente. Al acercarse a mis piernas las alargo para rodear levemente las suyas con las mias, apoyando simplemente los tobillos tras las suyas. Su sonrisa despreocupada me hace suspirar, relajada de sobremanera. Antes de que Mark hablara Catherine se queja como si tuviera hambre y llevo el biberón a su boca, comproband oqu está en la temperatura que necesita. Cuando ella comienza a beber, le miro para escucharle totalmente. -En ese caso, no me preocupo... ¿no? Me refiero... ¿crees que vas a echar de menos algo de antes del nacimiento de ella? No quiero que esto te cambie demasiado, ni que dejes de hacer muchas cosas que antes hacías... no sé si me explico -después de hablar agacho la mirada para ver a Catherine sentada en mi regazo y haciendo como que quiere coger el biberón por si sola, cogiendo aire ruidosamente por la nariz como con ansia de beber más de lo que su pequeño cuerpo y su pequeña capacidad puede dejarle. Esto me hace reír y desviar los labios a la frente de Mark, besándola un par de veces con los ojos cerrados, con todo el amor del mundo.
-A mi... nada, nada de gravedad me refiero. Tambien estoy bien... solo un pequeño problema -y mis labios vuelven a besar su frente, como diciéndole que no se preocupara demasiado, que es una tontería pero quería contarle todo y que nunca dejáramos de hablar y tener esa confianza mutua.

**Mark Renton** Jue Mayo 13, 2010 2:21 am

Amplío la sonrisa nada más notar su asentimiento y la intensidad de su mirada, a sabiendas de todo el apoyo que me brinda con solo mirarme. Nunca me he sentido tan seguro como con ella, nos protegemos mutuamente y no por obligación, sino todo lo contrario... es una necesidad que sentimos los dos y eso me parece un gesto de lo más bonito. -¿Seremos los únicos? - se me escapan los pensamientos en voz alta y por ello suelto una carcajada leve, negando con la cabeza como diciéndole que no me haga caso. Igual la conozco y supongo que me preguntará, o tal vez opte por leer mis pensamientos una vez más. Sí que se ahorra saliva con esta simbiosis.
Su pregunta interrumpe mis excéntricos pensamientos y torno mi gesto algo más serio, sin negar ni asentir. -Por mucho tiempo reprimí pensar en ellos porque la verdad es que es odio lo que siento, más que nada. Pero ultimamente, desde que soy padre que no puedo evitarlo... intento comprender por qué lo hicieron y no puedo. Lo último que haría en la vida es abandonar a mi hija... abandonarlas a ustedes - hablo pausadamente y gesticulano con las manos, sin tardar en esbozar una media sonrisa. Después de todo eso es algo del pasado... a esta altura ya lo he asimilado, ya sé que no fue mi culpa ni la de Christian. ¿Pero entonces por qué?
Respondo a mis pensamientos encogiendome de hombros, riendo para mis adentros cuando me felicita. Tsk... y yo que estaba orgulloso de verdad. Mi propia mujer se rie de mis habilidades paternales. Sin embargo no me quejo y asiento a lo que dice sobre hablar, de acuerdo con ello... ultimamente hubo demasiado de lo otro, por decirlo de manera censurada. Mi mirada desciende hacia la niña, la cual bebe leche como yo el whisky... si es que va a ser cierto que nos parecemos ella y yo.
Las proximas palabras de Evan me hacen alzar la mirada de nuevo hasta encontrarme con sus ojos y arrugo los labios, sabiendo que lo normal sería echar de menos mi vida pasada. Pero bueno, ¿desde cuando soy normal?
-La verdad es que no, para nada. Los excesos ya no son lo mío... vale que el whisky es una pasión, pero bueno, es como los zapatos para las mujeres :braq:

- explico, dando a entender que no voy a dejar de hacer nada de lo que me apetece. Espero que por su parte sea igual, claro.
No soy capaz de percatarme de que Catherine intenta beber más de lo que puede su cuerpo (ya van dos semejanzas conmigo) ya que los besos de Evan desvían toda mi atención a aquel gesto, disfrutando, como siempre, de su contacto. Mientras ella hace eso dejo caer un beso sobre su cuello, acomodándome al agarre de sus piernas sobre las mías.
-¿Un problema? - pregunto, empezando a preocuparme de ante mano. -Dime... Suspect

-

**Evangeline Voltaire** Jue Mayo 13, 2010 5:06 pm

Me encojo de hombros sin saber si serían los únicos o no, la verdad es que sin entender muy bien la pregunta, pero de entenderla tampoco hubiera sabido contestarle. En todo momento no desvío la mirada de él, sabiendo que Catherine estaba muy concentrada en el hecho de mirar la leche en mi otra mano y a Mark con toda la curiosidad del mundo... y yo en escuchar sus palabras, con una media sonrisa, una especie de mueca como indicándole que estaba escuchandole. Ligeramente azorada. Aprovecho que tengo el brazo que tiene el biberón en la mano para alargarlo y rodear su cuello con éste, apoyando la mejilla en la suya... abrazándolo levemente, con cuidado de tener a Catherine entre nosotros. -No fue por vosotros, estoy segura. Quizás algun problema económico, o algun problema a secas, pero tambien estoy segura de que estarían muy orgullosos de tener unos hijos como vosotros...
Conforme hablo voy separando mi mejilla de la suya para mirarle de frente, rozando los dedos con su mejilla al deshacer el abrazo, más que nada porque escuchaba a Catherine quejarse de que no se lo diera... haciendo pucheros como si fuera a llorar. Y nadie quería que hiciera eso, claro. Finalmente se lo doy y ella levanta las manos como si quisiera cogerlo sola, pero no lo iba a soltar obviamente. Me quedo mirándola desde la altura hasta que vuelve a hablar. Sonrio ante lo que dice, nunca está de mas una buena noticia como esa.
-Me alegro, entonces. No soportaría que por mi culpa dejaras de hacer cosas que quisieras y menos cambiarte... -asiento con la cabeza, comprendiendo que ninguno de ambos dejariamos de hacer cosas que quisiéramos por todo esto. Apoyo la cabeza contra la suya cuando el besa mi cuello, a falta de un abrazo, aun graciosa por el ruido que hace la niña. Vaya problemón... ¿ahora como le explico esto? Igual lo tenía que hacer, como con todo lo que hago con él, así que suspiro intentando ordenar las palabras.
-Yo... -susurro besando su mejilla intentando imitar que lo hago con los dedos, intentando evitar que se preocupe. -Desde que nació Catherine apenas como, y si lo hago es poco o mal... no sé si es algo normal de las madres primerizas o ha sido una obsesión mia por volver a ser físicamente como antes... pero no puedo evitarlo, no sé por qué. Apenas tengo hambre -le miro fijamente, como diciéndole en silencio, ¿a que no era para tanto?

**Mark Renton** Jue Mayo 13, 2010 8:31 pm

Siento un escalofrío recorrerme la nuca en cuanto me abraza como puede y no dudo un segundo en corresponder aunque sin mucha fuerza, cuidando, al igual que ella, de no aplastar a la niña entre nosotros. Con ese gesto me alcanza para confirmar mis pensamientos sobre su protección hacia mi, sabiendo que nada puede pasarme si estoy entre sus brazos. Como si fuera una especie de amuleto.
En cuanto habla mantengo su mirada con igual fijeza, frunciendo ligeramente el ceño al no estar de acuerdo. MIs labios también se arrugan, pero más que nada por el contacto de sus dedos en mi mejilla.
-Da igual lo que pudo haber sido... nunca les perdonaré lo que hicieron - trago saliva deshaciendo el contacto visual para mirar a la niña de nuevo y esbozo una graciosa media sonrisa al ver como quiere cojer el biberón por sí sola, si es que hasta los bebes aparentan ser más grandes de lo que son. Noto que tiene algunas gotas de leche en la comisura y elevo una de mis manos para limpiarlas con mi dedo pulgar, volviendo a mirar a Evan en cuanto lo consigo, con una sonrisa más amplia.
-No te preocupes... sé que nunca dejariamos de ser nosotros mismos - murmuro como respuesta a sus palabras, refiriendome a nosotros dos en la frase.
Antes de entrelazar ambas manos sobre su cintura limpio mis dedos sobre mi pantalón sin muchas vueltas, dispuesto a escuchar su problema y a ayudarla si es que puedo. Mis ojos se entrecierran a medida que las palabras abandonan su boca pero a pesar de ello no desvío mi mirada de sus ojos, notando la sinceridad en lo que dice. Antes de responder suspiro entre dientes, negando una sola vez con la cabeza.
-Hmm... entiendo - comienzo, pensando antes de responder y aun más preocupado que antes. No hace falta que confirme que no tengo idea de si es normal en mujeres embarazadas. -No deberias obsesionarte con eso, siempre estás bonita sin importar tu figura... puede hacerte mal y es lo último que queremos, cierto? - bajo la mirada hacia Catherine como incluyéndola en el 'queremos', sin tardar en mirarla de nuevo. -Y como no puedes evitarlo tendré que hacerte comer... ¿qué te apetece? - elevo una comisura antes de dejar caer un simple beso en sus labios, ladeando la cabeza hacia la nevera como para indicarle que estoy dispuesto a cocinarle lo que más le guste.

**Evangeline Voltaire** Jue Mayo 13, 2010 8:52 pm

Hago un gesto ligeramente sorprendido cuando se toma tan mal lo que le digo, aun así sin separar mi rostro del suyo. Apenas pienso antes de hablar, estoy segura de lo que digo. -No he dicho que les perdones, es obvio que nunca te diría eso... solo intento buscarle una explicación, por si eso puede dejarte más tranquilo...
Y tampoco he dicho que hay miles de soluciones antes del abandono, y por eso yo lo entiendo casi menos que él... solo intentaba hacerle bien y al no conseguirlo decido mejor dejar el tema, agachando la mirada cuando desvía la mirada de él pensando por un momento que la he cagado y que no debería haber tocado un tema así... reprimo suspirar aunque mi mirada se pierde en algun punto de su pecho hasta que vuelve a mirarme sonriente. Yo alzo las comisuras todo lo sinceramente que puedo de acuerdo con que nunca cambiaremos tal y como somos, hagamos lo que estemos haciendo. Por si no le queda claro que lo estoy, asiento con la cabeza.
Dejo que me abrace antes de echar un rápido vistazo al biberón y notando que mucho no le queda, antes de dejar mi mirada fija en la de Mark conforme hablo. Sus gestos dicen todo lo que opina, no dejaré de complicarlo todo, eso está claro... pestañeo varias veces mientras pronuncia el "entiendo", aun mirándole agradeciendo todo lo que me soporta y que esté ahi siempre. Me rio entre dientes mientras Mark incluye a la niña en lo que quieren, justo en el momento que ella deja de beber como intentando prestarle atención, mirando a su padre con toda la boca manchada de leche, sin entender.
-Lo hago sin querer... por miedo, supongo. No sé si estaba preparada a todo esto -digo refiriéndome a los cambios no en lo que tenga que hacer, si no en mi propio cuerpo. Dejo el biberón vacio a mi lado y saco un paquete de cleenex que habia en el cajón justo al lado de nosotros, abriendolo nada más de dos centímetros, para estratégicamente sacar un único pañuelo. Limpio la boca de la niña que empezaba a respirar más fuerte, como cansada, sin tardar en unir la mirada con Mark justo en el momento justo, como si lo hubiéramos planeado. Con esa pregunta en mi mente se me cruzan miles de platos que quizás antes se me hubieran hecho apetitosos, pero ahora ninguno me llamaba.
-Sinceramente... -vuelvo a rodear la cintura de Catherine para alzarla levemente, cogiendola con un brazo y con la otra dando golpecitos su espalda, como para que hiciera de las suyas. Anda que lo que se ha metido entre pecho y espalda la niña... Eso no hace que Mark no pueda besarme, y yo cierro los ojos adelantando el rostro para devolvérselo con un gesto, como quedándome con ganas de más en el momento que desvía la mirada hacia la nevera. -Sinceramente, no sé... no me apetece nada ups

-respondo casi vergonzosamente, pero tenia que decirle la verdad siempre.

**Mark Renton** Jue Mayo 13, 2010 11:21 pm

Niego varias veces con la cabeza en cuanto habla, arrepentido de mi reacción anterior. Ella solo intentaba ayudarme de alguna forma. -Lo sé, perdon... ya sabes que es un tema delicado para mi. Y lo cierto es que no creo que tenga una explicación - murmuro notablemente apenado en mi tono de voz, esperando que entienda por qué le respondí así. Sé que sus intenciones eran buenas pero a veces no pienso precisamente antes de responder, y ella lo sabe. En cuanto noto su sonrisa algo forzada llevo los dedos hacia su mejilla y acaricio su piel tibia muy ligeramente, como diciéndole sin palabras que lo siento una vez más, y que todo está bien. Supongo que a esta altura ya habrá notado mi arrepentimiento.
Como tantas otras veces el intercambio de nuestras miradas se hace tan intenso y prolongado que se me nubla ligeramente la vista, pero no por ello dejo de mirarla. Sé que se preocupa por ser una carga para mi, o algo por el estilo... como si en algun momento pudiera dejar de soportar lo que le pasa. Se equivoca, y es lo que intento expresar al no apartar mis ojos de los suyos. Por ella puedo soportar cualquier cosa y la verdad es que nunca me ha parecido insoportable lo que le sucede, siempre tiene sus razones para todo y yo lo entiendo perfectamente. Por algo hemos pactado el amor eterno, nos conocemos mucho... los defectos y las virtudes, y por lo menos a mi, ella me encanta en su totalidad.
-Hmm... mira, yo creo que es una cuestión de tiempo. Supongo que después de comer por dos durante todo ese tiempo es entendible que luego no quieras ni ver la comida - arrugo la nariz, pensando en voz alta a la vez que hablo. -Y también creo que te tomará su tiempo volver a acostumbrarte a comer con normalidad... no debes tener miedo, realmente tu figura está bien. Yo te veo igual que antes del embarazo... o aún más flaca -
Casi sin pensarlo los brazos con los que la rodeo hacen el abrazo un poco más fuerte, como intentando protegerla con mis palabras y también con mis gestos físicos. Por un momento olvido que Catherine está entre nosotros, pero eso no significa que le haga daño al abrazar a Evan.
-¿Nada de nada? - inquiero, desechando la idea de cocinarle algo, ceñudo. -Sabes que no puedo obligarte a comer, pero deberás hacer un esfuerzo si quieres ponerte bien. Es difícil, lo sé... todo comienza aceptando el problema - mis labios se deslizan por su mejilla a modo de caricia improvisada y aprovecho el movimiento para esconder el rostro en su cuello, separando mi cuerpo del suyo lo justo para que la niña esté bien. Espero que lo dicho le sirva de algo, sé que no soy el mejor dando consejos ni ayudando a las personas, pero por ella hago el esfuerzo. No puedo evitar preocuparme por ella y por toda esta situación... lo que menos deseo es verla mal. Y en parte es mi culpa... por no darme cuenta antes ni controlar sus comidas como debería.

**Evangeline Voltaire** Sáb Mayo 22, 2010 6:37 pm

Percibo que niega con la cabeza pero hace tiempo que había desviado la mirada, pensativa. -No pensaba encontrársela. Simplemente intentaba ayudar, pero a lo mejor se me da peor de lo que creía -suelto una carcajada irónica antes de volver a mirarlo, hacía tiempo que percibía su arrepentimiento y por eso sonreía algo forzadamente, no pensaba que fuera algo que fuera su culpa... por eso la forzaba. Entrecierro los ojos ante su gesto, agachando levemente la mirada por la misma causa.
Este gesto no dura mucho ya que vuelvo a mirarle como sabiendo que estaba esperándome para decirme, sin palabras como tantas otras veces, que entendía mis razones por las que me pasaba eso. Como muchas veces pasa, las palabras quedan de mas y a veces sobran. Pero, aun a pesar de todo sigo pensando que no dejo de complicarlo todo con problemas estúpidos que, si me lo propusiera, posiblemente no tendría.
-Si tú lo dices, te creo... a lo mejor es por eso, pero ya tiene seis meses, Mark. No sé si es que todo me ha tocado más de lo normal por ser tan joven o es algo normal... -susurro cada vez más bajo dada la cercanía o como si quisiera que Catherine no se enterara, como si pudiera sentirse culpable con la edad que tiene. Tan solo puedo devolverle el abrazo con las piernas cosa que hago, frotando mi mejilla con la suya una única vez dando constancia de que estoy aqui y de que le devuelvo el gesto.
-Hombre, como poder puedes obligarme... y aceptarlo ya está aceptado. ¿Y tú, no comes nada? -cambio de tema a ver si así no me obliga ahora que le he dado permiso... sé que tengo que hacer un esfuerzo pero no sé como se hace... De hecho, no le he mentido. No me apetecía nada de normal.
Agacho la cabeza como con intención de rozar mis labios con su cuello tambien, conociéndole lo suficiente como para saber que ahora mismo está culpandose por tener que esperar a que yo se lo diga para enterarse... por lo que siseo cerca de su oído, como diciéndole que estoy bien y que no me voy a morir por algo así.

**Mark Renton** Jue Mayo 27, 2010 5:41 pm

-No digas eso, vale? - inquiero de manera automática en cuanto dice que no se le da bien ayudarme, a sabiendas de que sin ella yo no sería nada en absoluto. ¿Como se le ocurre si quiera pensar aquello? Sin embargo no agrego nada más al respecto, no porque no haga falta, sino porque no sé muy bien qué decir. La caricia de mis dedos en su mejilla se hace cada vez más ligera hasta que dejo caer mi mano sobre su regazo, con los labios arrugados. Se ve que los dos nos preocupamos demasiado por todo... y más aun el uno por el otro
Deshago el gesto reemplazandolo por una media sonrisa a medida que escucho sus proximas palabras, sin querer ser otra razón para su preocupación. -Hmm... ¿quieres que consultemos a un médico? - murmuro clavando los ojos en los suyos una vez más, inevitablemente serio. -Supongo que puede darnos una solución más eficaz que amarrarte a la silla para obligarte a comer - dejo escapar un suspiro casi imperceptible, pensando en todas las opciones existentes con el unico fin de que ella esté bien. Al fin y al cabo su bienestar es lo único que me importa en la vida... aun más que el mio.
Que me devuelva el gesto consigue tranquilizarme un poco pero a pesar de eso no me muevo, como si quisiera retenerla conmigo por siempre. No vaya a ser que huya de mi por denso, que se canse de que insista tanto en algo así. -Yo no... si tu no comes yo tampoco - exagero con una firme negación de cabeza, estirando el cuello en cuanto sus labios toman contacto con mi piel. Trago saliva, disfrutando el gesto a pesar de todo. VUelvo a elevar la mano para entrelazar mis dedos con su pelo, acariciando su nuca como para alargar el momento lo mayor posible. Sin siquiera separarme busco su oído con mis labios, susurrando con la mayor ternura de la que soy capaz. -Te amo, Evan... hazlo por mi, por nosotros -

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